A un año, he recorrido tanto que muchas veces siento vértigo.
Pero nunca dejé de sentir sus manos en mi espalda, sus abrazos, sus besos.
Nunca es tarde para sentirse agradecida, a pesar de todo.
19oct2014
19
oct
2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario